El Ayuntamiento de Zarautz aprueba una moción en la que condena la prohibición del homenaje a Jon Paredes ‘Txiki’.
El Pleno del Ayuntamiento de Zarautz aprobó ayer, con los votos a favor de PNV, EB-Aralar y Alkarbide, y la oposición por parte de PSE-EE y PP, una moción en la que condena la prohibición por parte del Departamento de Interior del Gobierno vasco del homenaje que iba a realizarse el pasado domingo en el cementerio de la localidad guipuzcoana al miembro de ETA Jon Paredes Manot ‘Txiki’.
En un comunicado, el PNV de Zarautz recordó que ‘Txiki’, vecino de Zarautz, fue «una de las últimas víctimas del régimen franquista», ya que fue fusilado el día 27 de septiembre de 1975 junto al azpeitiarra Angel Otaegi y tres miembros del FRAP. La asociación Ahaztuak 1936-1977 había convocado, coincidiendo con el aniversario de su ejecución, un homenaje frente a su tumba de Zarautz en memoria de todas las víctimas del franquismo, al que asistieron, «como acostumbran cada año», familiares y amigos de ‘Txiki’, pero la Ertzaintza impidió el acto, identificando a varios de los presentes. Al final todos ellos tuvieron que abandonar el cementerio. Los únicos símbolos presentes en el acto, según los organizadores, eran la ikurriña y una bandera republicana. La moción aprobada, iniciativa de PNV y apoyada por Ezker Batua-Aralar y Alkarbide, condena los sucesos acaecidos el pasado domingo en el cementerio de Zarautz y se solidariza con los familiares y amigos de Jon Paredes. Además, solicita al Gobierno vasco «una rectificación, que pida perdón a la familia y amigos por haberles prohibido conmemorar su muerte, que haga llegar un informe de la Ertzaintza sobre todo lo sucedido al Ayuntamiento de Zarautz, y que tome las medidas necesarias para homenajear y recordar a todas las víctimas del franquismo». En el texto, se exige a la Audiencia Nacional una «rectificación de urgencia», y que garantice el derecho a realizar homenajes a «los luchadores antifranquistas ejecutados», al tiempo que condena que ETA «utilice las muertes de los luchadores antifranquistas para justificar su existencia y su permanencia, cuando tanto el pueblo de Zarautz como el pueblo vasco en general le han pedido que desaparezca». Finalmente, reconoce el trabajo que realiza la asociación Ahaztuak 1936-1977 en el ámbito de la Memoria Histórica y en la defensa de la Verdad, la Justicia y la Reparación de las víctimas del franquismo.